Psicología positiva: vivir mejor enfocándote en lo que funciona
Psicología positiva: vivir mejor enfocándote en lo que funciona
¿Qué es la psicología positiva?
Conceptualizada por el psicólogo estadounidense Martin Seligman a finales de los años 90, la psicología positiva es el estudio científico de las fortalezas, recursos y mecanismos que permiten a las personas y a las comunidades florecer.
A diferencia de la psicología tradicional, que se centra en la patología, el sufrimiento y el malestar, la psicología positiva investiga la salud mental óptima, la felicidad duradera, la calidad de vida y el desarrollo del potencial humano.
No se trata de “pensamiento positivo” ni de negar los problemas, sino de explorar y reforzar los aspectos positivos de la experiencia humana, utilizando métodos científicos rigurosos y validados.
Una ciencia basada en evidencia
Durante más de 20 años, miles de estudios han buscado comprender qué factores contribuyen al bienestar duradero:
- satisfacción con la vida
- resiliencia
- optimismo
- relaciones satisfactorias
- logro personal
La psicología positiva utiliza herramientas de evaluación validadas, pruebas psicométricas y protocolos replicables.
Es una
disciplina científica seria, basada en resultados observables y no en suposiciones subjetivas.
Los 5 pilares del bienestar: el modelo PERMA
El modelo PERMA, desarrollado por Seligman, identifica cinco pilares esenciales para construir un bienestar sólido y duradero:
1. Emociones positivas (P - Positive Emotions)
Cultivar emociones agradables como la alegría, la gratitud, la calma, el orgullo o la curiosidad.
Estas emociones no sustituyen a las negativas, pero
amplían nuestros recursos mentales y emocionales.
Ejemplo: llevar un diario de gratitud y escribir cada noche tres cosas buenas que te hayan sucedido durante el día.
2. Compromiso (E - Engagement)
Hace referencia al estado en el que estás completamente concentrado y absorbido por una actividad. Se conoce como “estado de flow”, donde pierdes la noción del tiempo y te sientes alineado con lo que haces.
Ejemplo: tocar música, bailar, pintar, hacer ejercicio, cocinar… Lo importante no es la actividad, sino que te absorba por completo.
3. Relaciones positivas (R - Relationships)
Las conexiones humanas son uno de los predictores más fuertes de la felicidad.
Tener relaciones sinceras, profundas y recíprocas es
clave para el bienestar emocional.
Ejemplo: cuidar una amistad, escuchar activamente, decir “gracias”, pedir perdón o compartir momentos sin distracciones.
4. Sentido (M - Meaning)
Dar dirección y propósito a tu vida, conectándote con algo más grande que tú: una causa, una creencia, una misión o un valor.
Ejemplo: colaborar con una ONG, tener una profesión con propósito, transmitir valores a tus hijos.
5. Logros (A - Accomplishment)
Es la sensación de progresar, superarte, conseguir objetivos.
Estos logros refuerzan la motivación, la autoestima y la perseverancia.
Ejemplo: terminar un proyecto, aprender una nueva habilidad, correr una maratón o cumplir una meta personal.
Psicología clásica vs. psicología positiva
La psicología tradicional se enfoca principalmente en aliviar el sufrimiento, tratar trastornos mentales y sanar heridas emocionales.
La psicología positiva, en cambio, se centra en reforzar lo que está bien, lo que te da energía, lo que te hace sentir vivo.
Ambos enfoques no son contradictorios, sino complementarios. Uno repara, el otro expande.
Como dice Seligman:
“Hay dos estrategias complementarias para mejorar la condición humana: una consiste en aliviar lo que no va bien, la otra en fortalecer lo que es positivo.”
¿Por qué practicar la psicología positiva?
Estos son algunos de los beneficios comprobados por investigaciones científicas:
- mayor autoestima
- reducción del estrés y de los pensamientos negativos
- mejor salud física
- mayor resiliencia
- relaciones más satisfactorias
- aumento de la motivación intrínseca
En otras palabras:
lo que entrenas, se fortalece.
Al cultivar pensamientos, emociones y acciones positivas,
refuerzas redes neuronales que favorecen el
bienestar mental.
5 ejercicios prácticos de psicología positiva
Aquí tienes cinco ejercicios sencillos y poderosos para empezar hoy mismo:
1. Diario de viaje interior
Toma un cuaderno y conviértelo en tu espacio de expresión personal.
Escribe, dibuja, pega fotos, reflexiona. Haz de él un
reflejo de tu mundo interior.
2. Conciencia del momento presente
Escribe en una hoja cómo te sientes
en este momento exacto: tus emociones, sensaciones físicas, pensamientos.
Sin juzgar, solo observar.
3. El triángulo de la felicidad
- ¿Qué momento reciente te ha dado una gran satisfacción?
- ¿Cómo te sientes ahora mismo?
- ¿Qué evento futuro te hace sonreír solo de pensarlo?
4. Actividades que te llevan al flow
- ¿Qué actividad te proporciona placer auténtico?
- ¿Cuándo te sientes completamente concentrado y presente?
- ¿En qué situación sientes que eres útil y estás comprometido?
5. Ritual diario de gratitud
Cada noche, escribe
tres cosas positivas que hayan ocurrido en tu día: un gesto amable, una comida rica, un mensaje inesperado.
Con el tiempo, este hábito
entrena tu mente para enfocarse en lo bueno, incluso cuando la vida es desafiante.
Conclusión: una invitación a vivir con más conciencia
La psicología positiva
no te obliga a ser feliz todo el tiempo.
Es una forma de vivir más consciente, más compasiva, más abierta a lo que te da fuerza y alegría.
Te invita a reconocer tus capacidades, a cultivar tu alegría, a encontrar sentido y a diseñar una vida que esté alineada con lo que realmente eres.
¿Y si empezaras hoy mismo?
Dedícate unos minutos. Un cuaderno. Un bolígrafo. Un suspiro de presencia.
Y hazte esta pregunta tan simple como poderosa:
¿Qué va bien en mí hoy?
Namaste 🪷





